Mario se desempeñó como político trabajando desde una plataforma ideológica aparentemente conservadora. Su trayectoria como servidor público también estuvo estrechamente ligada a su cercanía al Partido Conservador que ideológicamente no era lejano del “liberalismo británico” con su defensa de la libertad, el orden, el progreso para el bien común y una intervención del Estado reducida a sus mínimas proporciones. Tanto así que fue miembro del Directorio Conservador y amigo de quien sería uno de sus jefes más representativos, Mariano Ospina Pérez (presidente de Colombia, 1946-1950).
Su padre, Francisco Laserna Bravo, fue conservador. La familia de su madre Helena Pinzón, tenía más afinidad por el Partido Liberal. Esta combinación puede explicar el porqué de la cercanía de Mario Laserna con una evidente independencia ideológica en materia política, donde no había espacio para el sectarismo partidista ni el dogmatismo.
¿Cuál fue el sentido de la política para Mario? La intención principal de Mario siempre fue cuestionar a caudillos y partidos políticos. Su visión de ambos es que iban tras la captura del Estado y perpetuarse en el poder sin contribuir al bien común ni aportar al progreso del país.
Cuando ejerció como concejal de Bogotá (1968), concejal de Ibagué (1971), embajador en Francia (1976) y embajador en Austria (1987) dio ejemplo acerca cómo debería trabajar un servidor público. En su etapa como senador de la República (1991), centró su agenda en la defensa del medio ambiente, el uso racional de los recursos naturales y la inclusión del debate ambiental y urbanístico en la política pública. Llevó a cabo una combinación de periodismo crítico y política, que fue llamada “Lasernismo”.
Aunque Laserna comulgaba con el Partido Conservador estaba siempre abierto a escuchar las ideas de copartidarios y opositores políticos o ideológicos. Su característica distintiva era la de libre pensador en tiempos que Colombia estuvo sumida en la violencia que originaba la pugna entre los dos partidos políticos históricamente dominantes, Liberal y Conservador.
Una permanente posición conciliadora y de búsqueda de soluciones racionales al conflicto se puede observar en su polifacética obra, marcada por la Universidad de los Andes, institución que funda y organiza en el contexto de la peor crisis política del siglo XX en Colombia, agravada por los sucesos catastróficos del 9 de abril de 1948, desencadenados por el magnicidio de Jorge Eliecer Gaitán.
Una vez terminados sus estudios en la Universidad de Columbia, EEUU., a su regreso al país, Laserna se propuso crear una universidad que aportara a la solución de la crisis nacional, agudizada por la violencia política, que en parte él atribuía a una clase dirigente insuficientemente preparada en materia académica y poco apta para dirigir el desarrollo del país en una etapa de grandes transformaciones sociales y económicas.
El grupo de personas que Mario convocó y que lo acompañaron en el propósito de transformar la educación superior se caracterizó por la heterogeneidad en materia política, pero aglutinada bajo la idea de una Universidad humanista e independiente ajena al control del Estado, de organizaciones políticas o religiosas.